El centro de atención: la fe

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El “Año de la Fe” (2012-2013), que la Iglesia a nivel universal, nos pidió a todos responder al llamado de la Nueva Evangelización, llegó a su fin en la Solemnidad de Cristo Rey el último domingo de noviembre. Sin embargo, nuestra tarea no ha terminado.  Tal como los Obispos de los Estados Unidos afirman en su página de Internet: “Para que la nueva evangelización sea una realidad es necesario convertirnos en peregrinos en un viaje o peregrinación con Jesucristo-al igual que el viaje de Jesús con los discípulos en el camino a Emaús.   El viaje o peregrinación incluye momentos de una profundización de nuestra fe, lo que aumenta nuestra participación en la vida sacramental de la Iglesia y conduce finalmente a nuestro destino de ser testigos cristianos.”
Por lo tanto, los obispos han desarrollado un Plan Pastoral de varios años para ayudar a las parroquias, diócesis y a toda la Iglesia en los Estados Unidos, para continuar con el trabajo iniciado durante el “Año de la fe”.
Durante este año 2013-2014, el centro de atención seguirá siendo la fe.  Los obispos han pedido que se preste particular atención  a los elementos específicos, que nosotros hemos incorporado en la Oración que hemos preparado y que estaremos usando en la Diócesis de Davenport durante este año.
En el 2014-2015, los obispos de los Estados Unidos quieren que centremos nuestra atención en la Liturgia y la Vida de la Parroquia.
Para el 2015-2016, las diócesis y las parroquias podrían prestar especial atención  a las iniciativas que buscan incrementar el Testimonio Cristiano y apoyar los esfuerzos de los obispos en las prioridades sobre la Vida y la Dignidad de la Persona Humana. Nosotros prepararemos oraciones especiales para cada uno de estos años, cuando el tiempo se acerque.  Por ahora, por favor, use la nueva oración diocesana cuando tengan reuniones, clases o en sus hogares.  Juntos, caminemos con Cristo.

Oración oficial de la Diócesis de Davenport, 2014
Dios de Compasión,
Una vez llamaste a un pueblo a caminar contigo
a través del mar y del desierto
a la tierra de tu promesa.

Así, también, tú llamas a las personas a caminar con Cristo,
llenándolas con el Espíritu Santo de tu amor
y alimentándolas con el Pan de la Vida.

Atráenos más profundamente al corazón de Jesús
y derrama tu Espíritu sobre nosotros,
en un nuevo Pentecostés,
que nos de la fuerza de seguirte a donde tú nos quieras llamar.

epay

Concédenos corazones abiertos y manos generosas
para que podamos escuchar el grito de los pobres
y compartir con ellos sus cargas.

Concédenos coraje
para que siempre podamos decir la verdad
y ser voz de los que no tienen voz,
testificando la dignidad de cada persona.

Que nosotros, en todo lo que digamos y hagamos,
como hijas e hijos;
como familias y hogares;
como escuelas y parroquias;
como Diócesis de Davenport,
siempre proclamemos las Buenas Noticias
de tu abundante misericordia.

Por Cristo nuestro Señor.
Amén.


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