El viaje ha empezado para el V Encuentro Nacional en el 2018

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Por Padre Sia
El Mensajero Católico

El último 13 al 15 de octubre del 2015, cuatro representantes de la Diócesis de Davenport (Sr. Miguel Moreno, Hna. Irene Muñoz, P. Dennis Martin, y el P. Joseph Sia) asistimos al taller de planificación regional para el “V (Quinto) Encuentro Nacional”, una conferencia cumbre multicultural que se celebrará en el 2018. El taller se llevó a cabo en el Centro de Retiro de la Universidad de Creighton en Griswold, Iowa. Asistieron hombres y mujeres de 13 diócesis de la Región IX, también llamada “El corazón de la tierra de los Estados Unidos”. Las diócesis se encuentran en los estados de Iowa, Nebraska, Missouri y Kansas. El obispo Richard Pates de la Diócesis de Des Moines celebró una misa y participó de una sesión con nosotros. Talleres como estos se llevan a cabo en otras regiones de los Estados Unidos. Desde ahora y hasta el 2018, se realizarán reuniones y talleres a diferentes niveles (parroquia, diócesis, región); para difundir la información y la formación de líderes y representantes para el Encuentro Nacional.

Líderes de la comunidad hispana de la Región IX, reunidos en Griswold, Iowa en la preparación de lo que va a ser El V Encuentro del Ministerio Hispano. En la reunión  estuvo presente el Obispo de Des Moines, Mons. Richard Pates.  Representando a nuestra diócesis de Davenport, estuvieron Miguel Moreno, Sr. Irene Muñoz, Padre Dennis Martin y Padre Joseph Sia.
Líderes de la comunidad hispana de la Región IX, reunidos en Griswold, Iowa en la preparación de lo que va a ser El V Encuentro del Ministerio Hispano. En la reunión estuvo presente el Obispo de Des Moines, Mons. Richard Pates. Representando a nuestra diócesis de Davenport, estuvieron Miguel Moreno, Sr. Irene Muñoz, Padre Dennis Martin y Padre Joseph Sia.

No obstante, la planificación para el Encuentro en el año 2018 no fue el único objetivo del taller. Eso me pareció interesante y refrescante durante el tiempo que pasamos en Griswold. Muchos de nosotros, nos hemos acostumbrado a participar de las reuniones para ‘planear’ un evento, es decir, asignar tareas, limar los detalles, prepararse para que las cosas no salgan mal o para asegurarse que hay un plan B, etc. Por supuesto, estas cosas son importantes y necesarias sobre todo cuando se trata de una conferencia nacional, pero en estas primeras etapas, nos centramos en el proceso de caminar hacia el Encuentro. La visión teológico-pastoral del proceso para el Quinto Encuentro se presentó como tal: en primer lugar, escuchar la llamada de Dios; y luego entender la identidad como católicos, la incorporación de la propia cultura en la identidad, pero siempre recordando que estamos viviendo el catolicismo en el siglo XXI en los Estados Unidos; y luego ser cons-cientes que estamos siendo enviados como discípulos misioneros en la Nueva Evangelización; y estar dispuestos a experimentar el amor de Dios en este Encuentro.

La primera actividad del taller fue una presentación sobre la Memoria Historia de los Encuentros, empezando por la primera, celebrada en 1972 en Washington, DC, hasta la más reciente, celebrada en 2000 en Los Ángeles. Eso ayudó a establecer el tono para el taller; es decir, que estábamos allí para comenzar la caminata juntos y compartir las experiencias de este viaje. Una segunda presentación fue la historia del catolicismo en el continente americano, a partir de la llegada de los misioneros españoles al “Nuevo Mundo”, la propagación del catolicismo en América Central, del Sur, México y los Estados Unidos.

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Después de estas presentaciones, nos llevaron en una Lectio Divina con la narración de la historia de la aparición de Jesús en el camino a Emaús del Evangelio de Lucas. Fue un recordatorio, que en este proceso de planificación, somos como los dos discípulos de Jesús que cami-naban en ese camino, y ¡cómo nos gustaría que nuestros corazones se quemen con celo! Después de la oración, reflexionamos en esta pregunta: ¿Cómo podríamos invitar a otros a experimentar a Jesús, específicamente en el Encuentro?

Mientras que los partici-pantes en el taller eran ministros hispanos del país; es decir, sacerdotes, hermanas y laicos que trabajan con los católicos hispanos, se señaló que este Encuentro es para todos los católicos en los Estados Unidos. Será un encuentro de las diversas expresiones de la Iglesia católica: un momento unificador, un lugar para compartir experiencias de unos a otros y, sobre todo, experimentar a Dios.

Se espera que este evento permita a la Iglesia en los Estados Unidos, refle-xionar sobre su pasado, analizar su situación actual y seguir adelante con nuevas energías, esperanzas para el futuro. Nuestra Iglesia es una Iglesia peregrina. Nos estamos mudando; estamos migrando. ¡Espero que muchos de nosotros nos preparemos con gusto a participar en este proceso hacia el Quinto Encuentro Nacional en el 2018!


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